Seamos sinceros, ¿a quién no le gustan las galletas? Lo más probable es que sea a todos. Y es que se trata de uno de los postres más sencillos y deliciosos que no solo les encanta a los más pequeños de la casa sino también a los más grandes.
¿Por qué nos gustan tanto las galletas?
Desde niños nos hemos acostumbrado a comer galletas, ya sea compradas en las tiendas o hechas en casa.
Muchos tienen la dicha de tener a esa abuelita que siempre preparaba esas sabrosas galletas cada vez que iban a visitarla o la receta casera que pasa de generación en generación y que ahora su madre la prepara de la misma forma, sin duda alguna es uno de los mejores postres que podemos preparar en casa.
Encontrar recetas sencillas para hacer galletas caseras no es tan difícil como muchas personas creen, la verdad es todo lo contrario, sobre todo si tienes los ingredientes en casa, como por ejemplo, harina, huevos, azúcar, mantequilla, entre otros.
Como se puede notar, se trata de ingredientes que son fáciles de conseguir y lo mejor de todo es que no son para nada caros. Es por esta razón, que a continuación te mostraremos una receta muy fácil, ideal para una merienda rápida o para esas visitas que no estabas esperando.
Se trata de una receta para unas 12 personas, que tiene una duración de apenas 15 minutos y puedes hacerla sin ningún tipo de dificultad, ya que como acabamos de mencionar, es muy fácil de hacer.
Los ingredientes necesarios para la preparación de esta receta son los siguientes:
- 280 gramos de harina o 2 tazas aproximadamente.
- 100 gramos de azúcar o media taza.
- 125 gramos de mantequilla.
- 1 huevo.
- 1 cucharada pequeña de vainilla.
- Dulce de leche para decorar.
Los pasos para completar esta receta son:
- Toma un recipiente que tenga la capacidad para adecuada, coloca dentro la harina junto con la mantequilla y mezcla muy bien estos dos ingredientes. Debes precalentar el horno a unos 190 grados para que puedas comenzar con la preparación de estas deliciosas y sencillas galletas.
- Cuando los ingredientes anteriores ya se encuentren bien integrados, añade el huevo, el azúcar y también la esencia de vainilla y continúa con la mezcla.
- Notarás que en un momento será muy difícil trabajar la masa para las galletas con los utensilios, por lo que debes usar las manos para amasar. Recuerda siempre lavar muy bien tus manos cada vez que vayas a realizar cualquier tipo de preparación en la cocina.
- Cuando la masa tenga una textura compacta y notes que no se pega a tus dedos, puedes dejar de amasar.
- Después esparce un poco de harina encima de la superficie donde vas a trabajar la masa, ponla sobre esta y extiéndela utilizando un rodillo. Es muy importante que la estires hasta llegar a 1 centímetro de grosor aproximadamente. Posteriormente, con la ayuda de un molde especial para galletas, corta la masa para darle la forma que gustes.
- Con esto tienes casi todo listo, puedes introducir las galletas directamente al horno o colocarle algún tipo de decoración.
Si te gusta la idea de decorarlas entonces puedes hacer uso de la crema de leche para añadir la cantidad que desees sobre las galletas, puedes ayudarte con una manga pastelera para que sea aún más fácil.
¿Cómo hornear las galletas?
Llegó el momento de hornear las galletas. Para completar este importante paso, coloca todas las galletas en una bandeja e introdúcela en el horno durante unos 8 o 10 minutos.
Es muy importante que siempre te mantengas vigilante, debido a que las galletas pueden estar listas más rápido de lo que crees y no querrás que se quemen. Para saber cuál es el momento ideal para retirarlas, solo debes prestarle atención al color, si están sutilmente doradas, eso quiere decir, que ya están listas.
Ten mucho cuidado cuando vayas a retirar la bandeja con las galletas del horno, utiliza algún utensilio para cogerlas ya que estarán muy calientes. Lo más recomendable es que esperes unos minutos a que las galletas se enfríen y cuando esto suceda, puedes degustarlas.
Tal como hemos mencionado en un principio, se trata de una receta muy fácil que puedes hacer en cualquier momento y ten por seguro que no solo los pequeños de la casa las disfrutaran, tus invitados quedarán tan fascinados que te pedirán la receta.